
África como pretexto.

África, un continente inabarcable, tan cercano y tan aislado, tan vital, tan maltratado, tan explotado y, al mismo tiempo, tan original y con tanta facilidad para la complicidad.Hay muchas áfricas en cada parte de África, incontables historias para perfilar cada opción de identidad e infinidad de colores para acompañar la diversidad.Un continente de pieles claras, tostadas u oscuras, de sonrisas luminosas, de intensos contrastes entre naturalezas salvajes y ciudades abarrotadas que se reinventan sobre un reducto colonial, de paisajes desérticos salpicados de baobabs y sucesión de pequeños pueblos con calles sin asfaltar, de pies descalzos, de vestidos luminosos y de elegancia natural.Tras recorrer Túnez y Marruecos, la primera vez que viajé al “África Negra”, fue a Senegal, en 2008. Fui con Amaro (amigo artista y vital) y sus hijos (Lourdes y Jairo) a visitar la “Bienal de Arte Contemporáneo africano - Dak’Art” que convoca, los años pares, a artistas de todo África (y de la diáspora) a exponer en más de trescientos espacios distribuidos por Dakar y San Luis.La intensidad del viaje, lo diferente, la novedad de lo que permanece, los paisajes, la naturaleza, me ha llevado a repetir… He vuelto varias veces a la bienal y a recorrer Senegal, a visitar Nigeria, …a trabajar (dos años) en Sudáfrica, ...a descubrir otros contextos y a descubrirme a mí mismo en ellos.Esta exposición recupera cuadros que pinté sobre sacos de café transcribiendo fotografías tomadas durante la bienal Dak’Art 2008 y añade algunas esculturas, máscaras y collages, inspirados en momentos africanos y que aquí (un espacio conectado con África) me sirven de pretexto para exponer y celebrar.
Félix M. Téllez


